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Texto latino

CAPÍTULO VIII

 

La forma en -dus es siempre participio pasivo. Las

formas en -di y -do son también pasivas, salvo que

tengan un acusativo expreso. Es frecuente el giro

Tempus est legendi librorum.

     El término gerunda procede de gerendo o gerundo, ya que se refiere a aquellas formas que proceden (gerantur) y vienen de un participio pasivo. En Livio leemos muchas veces Pro re bene gerunda; y Servio, en su comentario a Virgilio, escribe muchas veces Gerundi modus, aunque algunas veces por error se ha escrito Gerundii modus.

     Antiguamente, del participio en -dus procedían cuatro formas que regían acusativo, mientras que del participio en -tus, sólo una: Lectum libros.

     La forma en -dum, que puede ser tanto nominativo como acusativo; así en Legendum est libros o legendum esse libros. Esta forma regía acusativo. Varrón, en Lengua latina 7: Quocirca radices eius in Hetruria non in Latio quaerendum est; en la misma obra, lib. 9: Quum inquiunt utilitatis causa introducta sit oratio, sequendum non quae habebit similitudinem, sed quae utilitatem; en el mismo libro: Sic enim omnes repudiandum est artes; Lucrecio, en libro 1: Multa nouis uerbis praecipue quum sit agendum; el mismo: Motu priuandum est corpora quaeque; Varrón, en Agricultura: Canes paucos et acres habendum. Ahora bien, estas construcciones, que son rechazadas por Cicerón, aunque se citan erróneamente algunas de él y de César, cayeron en desuso. Igualmente antigua es la frase: Venit ad recipiendum pecunias; y la de Varrón, libro 9: Ad discernendum uocis uerbi figuras. Hoy día, muchos utilizan giros de este tipo y creen que lo hacen como lo hacían los buenos autores; es un error, ya que los testimonios aducidos de Cicerón tienen ya hoy otra lectura, como ad orandum deos, que debe ser leído ad orandos deos. En lo que se refiere al texto de Valerio Máximo, libro 5, cap. 2, Super hoc aedem et aram fortunae muliebri eo loco quo Coriolanus exoratus fuerat faciendum curauit, algunos leen faciendam; aunque aquí puede mantenerse el faciendum, ya que así hablaban los más antiguos. En el caso de Livio, libro 7, Ad conciliandum gratiam, y libro 26, Ad urbem unam oppugnandum, Carlos Sigorio lee, a partir de antiguos manuscritos, conciliandam et oppugnandam. Tampoco es un obstáculo para mi doctrina el texto ciceroniano a propósito del Hércules de Pródico: Ad eligendum quam quisque uiam sit ingressurus; y es que en este caso es toda una oración la que está funcionando como sustantivo; es como si se dijera: Creditum est, o credendum est Romam esse caput mundi. En definitiva, es correcto decir legendum est o legendum esse, pero no lo es decir legendum est o esse libros; en el primer caso se trata de un participio neutro, cuyo sustantivo es legere; en el segundo se trata de un arcaísmo y de una expresión en desuso. En el caso del texto virgiliano, del libro 11, Pacem Troiano ab rege petendum, el gerundio está en acusativo y se sobreentiende esse, como se deduce de los ejemplos anteriores; pero yo defiendo que en este texto hay que leer petendam y no petendum, a partir de un manuscrito que se encuentra en Salamanca, en el colegio de San Bartolomé. En cuanto a Lucrecio, libro 1, Multa nouis rebus praesertim quum sit agendum, puede muy bien faltar katà.

     En definitiva, mi doctrina es esta: los gerundios en -di y -do son verbos, si tienen expreso el acusativo, como ocurre en legendi libros y legendo libros; en caso contrario, son participios neutros, cuyo sustantivo sujeto es legere, como en tempus est legendi legere, en español "tiempo es que se lea”. A este respecto, los gramáticos suelen croar inoportunamente diciendo que hay algunos gerundios en -di y -do que tienen significado pasivo. Yo afirmo que las formas en -dus, -di, -do, -dum tienen siempre significado pasivo, si no llevan un acusativo. Pero analicemos los ejemplos aducidos por ellos, ya que no es inútil entretenemos en su explicación. Ovidio, en Fastos 5, de Arión: Pretiumque uehendi cantat, es decir: uecturae; Suetonio, en Claudio: Harpocratem, cui lectica per urbem uehendi ius tribuit; en ambos casos falta se o se sobreentiende el sustantivo tò uehere o uehi, o bien hay que decir que el verbo ueho tiene un significado peculiar, ya que uector es el que uehit y el que uehitur. Livio, libro 5: Is quum in pace instituisset pueros ante urbem lusus causa exercendique producere, es decir: exercitationis et lusus gratia. Varrón, en Agricultura, libro 2, cap. 7, a propósito del caballo: Si fastidium saliendi est, es decir: salturae o coitus. Justino, en el libro 37, de cierto príncipe: Athenas quoque erudiendi causa missus, es decir: eruditionis; sería erudiendi erudire, en español "de la erudición" o "del enseñamiento"; lo mismo podría decirse de un sabio: Athenas mittitur erudiendi gratia. Ovidio en La nuez: Sic ego sola peto?; soli quia causa petendi est, es decir: petitionis o tou peti.

     En dativo. Plinio, libro 15, cap. 18: Nam alexandrinae uix sunt uescendo, y en el libro 21, cap. 16: Radix eius uescendo est, es decir: apta esui; y en el libro 34, cap. 15: Ferrum rubens non est habile tundendo, es decir: tunsioni; y en el libro 13, cap. 12: Charta emporetica inutilis scribendo, es decir: scripturae; el mismo, en libro 31, cap. 6: Vtilis est bibendo atque purgationibus. Del mismo tipo es la siguiente frase que solemos utilizar: Maturuit nubendo puella, es decir: nuptui. Plauto, en Epídico: Epidicum quaerendo operam dabam. Pero esto último es un gerundio; en los otros casos se trataba de participios.

     En acusativo, los gramáticos citan erróneamente como verbos los siguentes textos de Virgilio: Ínter agendum capras y Ante domandum boues, cuando en realidad se debe leer sólamente: Ínter agendum y Ante domandum. Cicerón: Hic autem locus ad agendum amplissimus, ad discendum ornatissimus est uisus, es decir: ad actionem et dictionem exercendam; el mismo, en Tusculanas 1: Tum multitudinem pecudum partim ad uescendum, partim ad cultus agrorum, partim ad uehendum, es decir: ad uictum, cultus et uecturam. Se trata de participios pasivos con terminación neutra, en los cuales falta el infinitivo del verbo; Salustio, en Jugurta: Quum Iugurtha Tisidium ad imperandum uocaretur; este texto ha atormentado siempre a sesudos estudiosos, y no sólo a los gramáticos; Cicerón, en la carta 25 del libro 9: Quare ades ad imperandum seu parendum potius, sic enim antiqui loquebantur; es como si dijera: Antiqui dicebant Imperare alicui pecunias, es decir: Íubere ut pecunias soluat; así la frase Ades ad imperandum, es decir: Vt tibi aliquid imperetur; así también Íugurtha uocatur ad imperandum tò imperari, es decir: Vt imperata faceret.

     También en ablativo dicen que tiene significado pasivo. Quintiliano: Memoria excolendo, sicut alia omnia, augetur; Virgilio: Frigidus in pratis cantando rumpitur anguis; el mismo: Vritque uidendo foemina. Pero yo, vuelvo a repetir, afirmo que siempre tiene significado pasivo, pues ¿en qué se diferencian Defessus sum legendo y Defessus sum legendis libris, cuando en el primer caso falta legere? Así también, en excolendo falta excolere, y en cantando falta cantare o carmine; pues ¿qué más ignorancia que explicar el cantando como lo hace Servio, es decir: Dum cantatur anguis? ¿O es que en aquel otro texto de Virgilio, cuando dice Cantando tu illum, vamos a entender también Dum cantatur?; que en este caso falta to carmine lo indican claramente los versos anteriores: Carmina uel caelo possunt deducere lunam, carminibus Circe socios mutauit Vlyssis, frigidus campis cantando rumpitur anguis. Nota el polyptoton: Carmina, carminibus, cantando. Lo mismo ocurre en Vritque uidendo foemina, es decir: Taurus uritur, dum uidetur foemina; uidendo equivale a in tò uidere, es decir uisu ipsius foeminas, ya que tò uisu puede aquí ser interpretado como pasivo, como ocurre en aquel otro texto de Virgilio, entendido por pocos: Incipe, parue puer, risu congnoscere matrem, es decir: dum fit risus; pero se trata, entiendo, de la risa de la madre. Podría también decirse: Ridendo cognoscere matrem, es decir, dum illa ridet, de la misma forma que dijo Vrit uidendo, es decir, dum uidetur, o sea, facto uisu. Así hay que entender el texto de Lucrecio del libro 1: Anulus in digito subter tenuatur habendo, es decir: Dum habetur, como explica Lambino.

     Tempus est legendi librorum es un giro frecuente y elegante. Pero la mayoría, incluso los más sabios, ignora el origen de esta expresión. Yo, en otro tiempo, di esta explicación: Todos los participios y todos los verbos en forma de participio, al convertirse en nombres, pierden su construcción típica de verbo y rigen, a la manera de los nombres, un genitivo; así amans uxorem es un participio, pero amans uxoris es un nombre. Eso es lo que ocurriría en tempus est legendi librorum que equivaldría a tempus est lectionis librorum. Después he cambiado de opinión y considero que la regla general es esta: En un adjetivo y en un participio siempre falta el sustantivo negotium o el infinitivo del verbo; así en legendum est se sobreentiende negotium o legere; en español: "Tiempo es que se lea"; lo mismo ocurre en tempus est legendi librorum, de forma que librorum es regido por legere, con el mismo valor que tempus lectionis librorum. Sin embargo, si se dice tempus est legendi libros ya no se trata de un participio, sino de un verbo en forma de participio. En los demás casos, la forma en -dus tiene siempre significado pasivo y es un adjetivo. Y ahora, puesto que a los gramáticos les extraña la forma legendi librorum, voy a aducir distintos testimonios. Cicerón, en Sobre la invención, 2: Fuit exemplorum eligendi potestas; en Filípicas, 5: Antonio facultas detur agrorum suis latronibus condonandi; así, en efecto, lee este texto Budeo; el mismo Cicerón, en Sobre la adivinación, 2: Dolebis tandem Stoicos nostros Epicureis irridendi sui facultatem dedisse; en Limites, 5: Aut eorum, quae secundum naturam sunt, adipiscendi; el mismo, en Sobre la adivinación: Reliquorum siderum quae causa collocandi fuerit etc; Suetonio, en Augusto: Permissa iocandi licentia diripiendique pomorum et obsoniorum et missilium; Plauto, en Cautivos: Nominandi tibi istorum magis erit quam edundi copia; César, en Guerra de las Galias, 4: Venerunt purgandi sui causa; en el mismo libro: Sui liberandi facultas daretur; en el mismo libro 6: Purgandi sui causa ad eos legatos mittunt; en el mismo libro: Vt mercatores recipiendi sui facultatem non haberent; Livio, en el lib. 21: Nec enim uereor ne quis hoc me uestri adhortandi causa magnifice loqui existimet; Plinio, en las Cartas: Quum illorum uidendi gratia me in forum contulissem; Terencio, en Haut.: Date crescendi copiam: nouarum qui spectandi faciunt copiam; así hay que leer este texto, que hasta ahora ha atormentado a los gramáticos y a Budeo; Varrón, en Agricultura 2, 1: Aliquod fuit principium generandi animalium; Gelio, en lib. 5: Euathlus orandi causarum cupidus.

     A propósito de esta construcción yo dudé durante algún tiempo si, de la misma forma que decimos Veni causa uidendi puellarum, se podría decir tambien uidendi puellae; la doctrina de los gramáticos es esta: si el gerundio lleva un acusativo del plural, como ocurre en legendi libros, también podrá llevar un genitivo del plural, como en legendi librorum. Pero yo me preguntaba por qué no podría también llevar acusativo del singular. Y Terencio por fin me enseñó que se podía decir de las dos formas; las palabras son de Pánfilo a propósito de Filomena: Ego eius uidendi cupidus recta consequor, es decir: Cupidus uidendi uidere eam, o eius Philomenae; y en Formión: Vt neque mihi eius sit amittendi nec retinendi copia, donde está hablando de una amiga; Ovidio, en Tristes, 2: Et spem placandi dantque adimuntque tui, en el mismo poema: Olim placandi spem mihi tolle tui, donde está hablando de una mujer; Plauto, en Truculento, en la escena que comienza Num tibi iam: Quoniam tui uidendi est copia, donde habla de una meretriz. Así pues, tanto si se habla de mujer como si se habla de varón, hay que decir Cupidus sum uidendi tui, o uidendi; el participio pasivo es, en efecto, un adjetivo; equivale a uidendi uidere. De ahí que tenga que rechazar la lectura que se hace en la carta de Ascontio de Ovidio: Sit modo placandae copia parua tui, ya que habría que leer placandi, puesto que los genitivos mei, tui, sui, nostri, uestri no admiten distinciones de género. Por otro lado, encontramos a cada paso escrito placatio tui, cura uestri, amor nostri. A propósito de este gerundio cuando lleva genitivo del plural, dijo verdaderas tonterías Lorenzo Valla, en libro 1, cap. 27: "Cada vez que hay que emplear el relativo, se hace necesario utilizar este gerundio; así Hic dies attulit initium dicendi quae uellem, en lugar de dicendorum quae uellem". Pero la opinión de Cicerón es muy otra, según el texto que cité más arriba: Aut eorum quae supra naturam sunt adipiscendi; Suetonio, en Augusto: Reparandarum classium causa, quas tempestatibus etc.: el mismo, en Tiberio: Et regurgandorum tota Italia ergastulorum, quorum domini etc.; Valerio Máximo, libro 2: Finem profecto fruendarum opum, quibus etc.; Livio, libro 32: Rerum suarum, quas posset referendarum secum dominis ius fiebat.

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